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1. Cloro
   • Se utiliza para desinfectar el agua
   • Puede causar mal sabor, olor e irritación de la piel
2. Plomo
   • Se filtra de tuberías y fontanería viejas
   • Relacionado con problemas de desarrollo, especialmente en niños
3. Mercurio
   • Subproducto de residuos industriales
   • Puede dañar los riñones y el sistema nervioso
4. Amianto
   • Procede de tuberías de agua viejas
   • Potencial riesgo de cáncer si se inhala o se ingiere
5. Cloramina
   • Alternativa al cloro para la desinfección
   • Puede causar problemas respiratorios y cutáneos
6. COV (compuestos orgánicos volátiles)
   • Procedente de pesticidas, disolventes y residuos industriales
   • Puede afectar al hígado, los riñones y el sistema inmunitario
7. PFAS («químicos eternos»)
   • Se encuentran en utensilios de cocina antiadherentes, botellas de plástico y envoltorios de alimentos. Persistentes en el suministro de agua potable
   • Relacionados con problemas inmunitarios y hormonales

Busca filtros con la etiqueta NSF/ANSI 42 (efectos estéticos) y NSF/ANSI 53 (contaminantes relacionados con la salud) para garantizar una protección eficaz.